CALDERON reforma MIGRATORIA

WASHINGTON, D.C. - El presidente de México, Felipe Calderón, abogó el jueves por una reforma migratoria amplia y comprensiva durante un discurso pronunciado en una sesión conjunta del Congreso estadounidense, donde además fijó su postura en torno a distintos temas tales como seguridad fronteriza y tráfico de armas.

En la víspera, el mandatario mexicano se reunió con su homólogo norteamericano Barack Obama en la Casa Blanca, donde ambos fustigaron la Ley Arizona y expresaron su apoyo a una vía de la legalización que cubra a la mayoría de los 12 millones de inmigrantes indocumentados que viven en Estados Unidos.

Defensa de los migrantes

En el duscurso, Calderón también hizo un llamado al Congreso estadounidense para que actúe y frene el flujo de armas que nutren a los carteles de la droga desde el norte de la frontera.

"Hay un tema en el que necesitamos su cooperación: detener el flujo de armas letales a través de la frontera", dijo el mandatario mexicano.









"Entiendo completamente la sensibilidad política de este tema. Pero quisiera pedir al Congreso que nos ayuden y que entiendan lo importante que es para nosotros", dijo y afirmó que el 80 por ciento de las armas incautadas a los carteles mexicanos provienen de Estados Unidos.

En ese sentido, pidió al Congreso norteamericano considerar la restitución de la prohibición de venta de armas de asalto, que expiró en 2004, "para detener el abastecimiento de este tipo de armas a los criminales".

Reforma comprensiva

En cuanto a la reforma migratoria, Calderón Pero lo más esperado del presidente mexicano dijo que ésta debería ser integral, y que gebeneficie principalmente a los mexicanos, quienes representan un elevado porcentaje de los casi 12 millones que viven y trabajan en Estados Unidos.

Calderón no dudó en tocar el tema migratorio, que le preocupa especialmente en estos momentos por la Ley Arizona.

"Cada migrante es un padre que quizá no vean a sus hijos. Estamos luchando por sus derechos estamos trabajando duro por México y por sus familias (...) Estoy totalmente en desacuerdo con la ley adoptada recientemente en Arizona, es una ley que no solo ignora la realidad, sino que introduce un ideal terrible", apuntó.

Tráfico ilegal de armas

Al insistir en el problema de la seguridad fronteriza y la guerra al narcotráfico, el mandatario mexicano solicitó el apoyo del Congreso para detener el flujo de armas de alto poder y otro tipo de armamento letal a través de la frontera que comparten ambos países.

Pidió a los miembros del Congreso "que nos ayuden y que entiendan lo importante que es esto para nosotros", y apliquen la legislación para detener el abastecimiento de ese tipo de armas utilizadas por organizaciones del crimen organizado y el narcotráfico.

"Hoy en día estas armas están siendo utilizadas por los criminales no sólo para atacar a bandas rivales, sino también a civiles y autoridades. Y con todo respeto nada garantiza que estas armas no serán utilizadas algún día para atacar a los ciudadanos y autoridades estadounidenses", señaló.

Cuando el mandatario mexicano tocó el tema de la lucha que emprende su gobierno contra el crimen organizado, el Congreso se desbordó en aplausos. "Permítanme explicarles, esta lucha no es sólo ni principalmente para detener a los narcotraficantes, es primero una lucha para garantizar la seguridad de las familias mexicanas y defenderlos de los abusos", dijo.

Obama ha insistido para que los legisladores de ambos partidos comiencen a trabajar en un proyecto de ley migratoria, que defina definitivamente la situación de unos 12 millones de inmigrantes indocumentados.

Obama, sin embargo, admite que aún no tiene el apoyo republicano necesario para aprobar esa ley. Aún no está claro si los trabajos iniciarán este año.









Calderón se convierte en el tercer mandatario extranjero que se dirige al Congreso estadounidense durante la presidencia de Barack Obama, tras el entonces primer ministro británico Gordon Brown y la canciller alemana Angela Merkel.

Agenda apretada

El titular del Ejecutivo federal, quien llegó a Washington la noche del martes luego de participar en Madrid, España, en la VI Cumbre de Jefes de Estado y de Gobierno de América Latina y el Caribe-Unión Europea, inició actividades con un desayuno con líderes de organizaciones cupulares hispanas.

Enseguida Calderón Hinojosa participó en la sesión conjunta del Congreso.

El miércoles, en diversos encuentros con su colega estadounidense Barack Obama, el presidente de México llamó a trabajar de manera corresponsable en temas como la crisis económica, la seguridad y la migración, así como en mantener una frontera segura.

Luego del encuentro con el Congreso, el jefe de Estado tiene prevista una ceremonia de entrega póstuma de la condecoración de la Orden Mexicana del Águila Azteca al senador Edward Kennedy, y un almuerzo con formadores de opinión y personajes del sector público y privado.

También Calderón, quien es acompañado por su esposa Margarita Zavala, depositará una ofrenda floral en la tumba del Soldado Desconocido, y tendrá una reunión de trabajo con el Comité de Relaciones Exteriores del Senado, que preside John Kerry.

Antes de volver a la ciudad de México, el presidente Calderón tiene prevista una reunión con el Caucus Hispano de la Cámara de Representantes, con lo que dará por terminada esta visita de Estado.

El último presidente mexicano que se dirigió al Congreso estadounidense en pleno fue Vicente Fox en septiembre de 2001, justo cuando el presidente George W. Bush empezaba a tantear el terreno para una reforma migratoria, que fracasó luego en dos ocasiones sucesivas, en 2006 y 2007.